Todos somos Anvil

El día 2 de abril, martes, la Filmoteca Rafael Azcona proyecta dentro de su ciclo «Cine y Música», enlazando con «Del Cassette al Spotify» el aclamado documental Anvil. El sueño de una banda de rock. Una homenaje a todos los sueños e ilusiones que no se alcanzaron, pero que no por ello hay que perder. Un documental sobre el amor a la música, la amistad, la lealtad y la honestidad.

En losrestosdelconcierto.com hemos invitado a José Ignacio Foronda a presentar este documental:

«Sigo sin entender por qué cogí la película de los Anvil de la biblioteca pública. No conocía al grupo, no me interesaba el heavy y había muchas más pelis… No sé, igual leí algo en la cubierta o igual es que se iba haciendo tarde y tenía que pillarme algo para el fin de semana. El caso es que salí con ella, y después de cenar la puse en el ordenador. No podía imaginarme lo que iba a pasar después.
Lo que pasó después, cuando apagué el equipo es que había asistido a una de las películas más emocionantes sobre el rock que había visto en mi vida. Mi hijo me miraba y decía: «¿Pero has llorado, papá?». Sí: había llorado en unos cuantos fragmentos de la película, y solo en alguno lo hice de risa.
Tiene la historia de los Anvil algunos momentos memorables, como la presentación del grupo; o cuando el líder de la banda va saludando a estrellas del rock con las que había actuado y ninguna le reconoce; o cuando le piden a su hermana que explique por qué le ha dejado todos sus ahorros para que puedan ir a Inglaterra a grabar un disco; o cuando perdidos en una ciudad de centroeuropa, después de un concierto, el del garito no les quiere pagar…
En los noventa, los Anvil no solo fueron el grupo de hard rock más importante de Canadá, sino que fueron uno de los tres o cuatro más importantes, en ese estilo, del mundo. Pero ya sabemos que en el mundo del rock y del pop es habitual jalear a los triunfadores, guardar memoria de ellos. Por eso esta película es tan importante: porque habla de la importancia de la ilusión, porque habla de la importancia de los sueños; porque la ilusión y los sueños son las únicas armas que tienen los creadores para superar el fracaso.
Esta película habla de lo que el rock significa en la vida de algunas personas. Ninguna película lo ha contado como lo cuenta esta. Así que creo que esta de los Anvil es una película emocionante que les encantará no solo a todos aquellos que alguna vez intentaron tener un grupo de rock y se quedaron en algún lugar del camino, sino a todos aquellos que no entienden la vida sin ilusión, ni sin sueños, ni sin rock.»

José Ignacio Foronda es escritor y músico, fue integrante entre otros muchos grupos de Obras Públikas. El día 12 intervendrá en la mesa redonda «El rock en la forja de la identidad. La experiencia de cuatro músicos de Logroño».

La película dará comienzo a las 20:15 y las entradas pueden adquirirse en la taquilla de la Sala Gonzalo de Berceo, C/Calvo Sotelo, nº 11

Los Coronas: «Adiós Sancho»

Hace casi ya dos décadas, una película se convirtió en símbolo de una generación y de una época, además de consagrar a su director. Fue «Pulp Fiction» de Quentin Tarantino, un hombre que en sus bandas sonoras se consagraba a la fina línea que va del frikismo al snobismo. Bien, aquella tremenda banda sonora nos descubrió a muchos la música instrumental «music surf», con un inicio demoledor a cargo de Dick Dale & His Del-Tones y el inevitable «Misirlou», insertado definitivamente en la memoria colectiva y el universo simbólico de una generación, asociado a Vicent Vega y Jules Winnfield. Y ahí quedó la cosa, aunque para entonces Los Coronas ya eran una realidad a través de David Krahe y el hiperactivo Fernando Pardo, de los Sex Museum.

Durante estos años, Los Coronas tenían un elevado prestigio y una casi nula visibilidad. Grandes músicos que hacían música instrumental de estilo surf, demasiado para nuestros esquemas cognitivos. Sin embargo, en 2010 Los Coronas y Arizona Baby se juntan para la gira «Dos Bandas y un Destino», y de ahí surgen Corizonas, una de las mejores sorpresas de los dos últimos años, como hemos visto y seguido en varias ocasiones, y que pudimos disfrutar por tercera vez el 21 de diciembre de 2012.

Tocaba volver a Los Coronas y se anunciaban grandes noticias, con la grabación de nuevo disco en Tucson (Arizona), bajo la producción de Craig Schumacher, que entre otros ha trabajado con los fronterizos Calexico. Y Pardo, Krahe, Loza, Vacas y la trompeta de Riechkalov, ya marca de la casa, firman un disco más ecléctico que los anteriores, con diversas tendencias, y algunas sorpresas. En ese sentido, la música surf sigue estando muy presente, en canciones como «Cleopatra Stomp!», en «Hey Cosacus», o en la genial «Rockaway Surfers». Pero ganan peso los sonidos relacionados con el western, lo fronterizo y, sobre todo, la influencia de Morricone. Así, el inicio con «Adiós Sancho», una de las mejores canciones del disco, podría salir en cualquier película de Tarantino (al tiempo), «Fuerte Comansi» (brillante título) remite a esas películas del oeste que todos conocemos, y el final del disco es un tema candente que tiene esas reminiscencias de la frontera hasta en el título: «Way to San José».

Pero también se advierten otras influencias, como cierto «casticismo» en el mejor sentido de la palabra, en algunos temas como «La Leyenda del Solitario», que mantiene un cierto toque a lo Morricone, y en «Baila Lola», una canción que sorprenderá a propios y extraños, y que a mí me parece una agradable y brillante sorpresa, con continuos cambios de ritmo y estilos.

En definitiva, uno de los discos del año hasta el momento para losrestosdelconcierto.com, la demostración de lo gran banda que son Los Coronas. Y sí, que alguien le haga llegar el disco a Tarantino.

«Del Cassette al Spotify» tienen cartel

Las «IX Jornadas de Sociología. Del Cassette al Spotify: jóvenes e identidades musicales», cuentan con un elegante cartel creado por el equipo de diseñadores de la Universidad de La Rioja.

Y más sorpresas que podéis encontrar en los bares de moda de Logroño, donde hemos llevado a cabo una «acción» que ya ha deparado algunas sorpresas a los que fueron encontrándose con ella. Y seguiremos dando guerra, eso no lo dudéis. Conectaros a Facebook y Twitter para tener más información sobre este mes de abril tan musical.
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Otro de nuestros favoritos, Josh Rouse y lo que tendría que haber sido un macro hit: «Love Vibration» del discazo «1972»