Jessie Ware, «What’s Your Pleasure?»

De lo que llevamos de año, uno de los mejores discos que hemos escuchado es Future Nostalgia de Dua Lipa. Una barbaridad de música disco que bebe de las fuentes de los setenta y ochenta. En la misma línea, pero con un tono ligeramente diferente, llega el también impactante What’s Your Pleasure? de la británica Jessie Ware, aunque se queda medio peldaño por debajo del de Dua Lipa. Pero estamos ante uno de esos discos brillantes en el que Ware se sale con su cuarto disco. Una Jessie Ware que es una desconocida para nosotros pero que nos ha impactado con estas canciones muy de finales de los setenta y de los ochenta, canciones que recuerdan al Euro Disco, a Donna Summer, a Giorgio Moroder, etc., pero también a otros sonidos del Soul británico de los ochenta. Un trabajo que te lleva a no dejar de mover los pies y a la pista de baile, con una Ware que canta con elegancia y sensualidad. Un disco que entra a la primera escucha y que te va conquistando sin contemplaciones. Una gozada.

Comienza con una de las mejores canciones del año, «Spotlight», primero tira de Pop orquestal para lanzarse a un sonido disco de los ochenta brutal. Y suma «What’s Your Pleasure?», otra barbaridad de canción con unas bases electrónicas que se clavan. «Ooh La La» se centra más todavía en el sonido disco europeo de los ochenta y lleva a un tono más hedonista. Y en «Soul Control» acelera el tempo todavía más. En «Save a Kiss» brinda una de las mejores canciones del disco, sigue con esas bases electrónicas tan bien fijadas y a mí me quiere recordar a la infravalorada Lisa Stansfield, pero más sonido disco, obviamente. La primera mitad se cierra con «Adore You», más sintetizadores al servicio de su voz elegante.

La segunda mitad comienza con un punto más Pop orquestal como es «In Your Eyes», en la que yo sigo viendo la influencia de Stansfield. En «Step Into My Life» retrocede a finales de los setenta, una canción todavía más hedonista, sonido orquestal con un punto más Pop de nuevo. Y ojo con «Read My Lips», para mí otra de las cumbres del disco, con ese bajo que tira hacia el Funk. Y qué decir de «Mirage (Don’t Stop)», para mí otra de las canciones sobresalientes del disco, con un estribillo brutal. «The Kill» es la canción menos lograda de todo el largo, un sonido un tanto angustioso. Y el cierre es para la elegante, épica y orquestal «Remember Where You Are», una canción ambiciosa.

Tremendo disco, fascinante y elegante. Junto al de Dua Lipa, como hemos comentado al comienzo del artículo, el que más nos ha hecho bailar en lo que llevamos de año. Una barbaridad.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Antes de enviar el formulario:
Human test by Not Captcha

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.