Ezcary Fest suena a Rock

Ezcaray (La Rioja), Ezcaray Fest 2019, 19 – 21 de julio de 2019

Llegaba la tercera edición del Ezcaray Fest y lo hacía con una importante novedad, la primera jornada se convertía en gratuita y pasaba al Parque Tenorio de la localidad. Por otro lado, Ezcaray Fest colgaba el «todo vendido», todo un logro en los tiempos que corren y en todos los debates que se generaran alrededor de los festivales. En esta ocasión, Ezcaray Fest apostaba claramente por el Rock ‘N’ Roll con un cartel con una línea muy clara, lejos del eclecticismo generalizado en los festivales. En Ezcaray, lo que iba a sonar eran las guitarras (de hecho, no hubo un teclado en el escenario principal los dos días, y no tengo nada contra los teclados, al contrario). Voz, guitarra, bajo y batería, en eso se basó el Ezcaray Fest, y en actitud y autenticidad rockera con unos destacados protagonistas, unos Berri Txarrak que regresaban a Ezcaray tras haber estado presentes en la primera edición de 2017 y que están en una exitosa gira de despedida. Sin duda alguna, ese fue el principal reclamo para acabar con el papel para el sábado 20 de julio, con una nutrida presencia de público procedente de Euskadi. Y es que las camisetas de Berri Txarrak se dejaron ver desde el día 19, aunque no fueron las únicas. El Ezcaray Fest no bajó el pistón desde el minuto 1, cuando Garbayo se subió al escenario del Parque Tenorio, y ya fue un no parar. Esta es nuestra crónica de la tercera edición del Ezcaray Fest, al que estamos abonados desde sus comienzos, y que dejó un gran sabor de boca, por seguir tirando de tópicos, habiendo dejado el listón muy alto, otro más, para una cuarta edición que ya ha sido anunciada para el año que viene.

Como decíamos, los programadores habían apostado claramente por sonidos guitarreros, en un cartel homogéneo y que no dejaba apenas resquicios para lo que no fuesen las guitarras eléctricas. El viernes por la tarde, el Parque Tenorio, escenario de tantos conciertos del festival de Jazz de la localidad, acogía una jornada gratuita con un cartel de altura. Siempre es un «marrón» el ser el primero en estas lides, y le tocó el turno a Garbayo que ha comenzado carrera en solitario con su recomendable Sonido forestal donde también abunda el Power Pop. A medida que la tarde iba cayendo, el público iba ocupando los huecos del Parque Tenorio mientras Garbayo y su banda iban desgranando las canciones de su disco, algunas de Zodiacs y versiones de Pistones con la mítica «El pistolero» y una muy sentida y arrebatada «You’re Gonna Miss Me» de los 13th Floor Elevators del desaparecido Roky Erickson. A continuación le llegó el turno a Los Deltonos, otro de los principales reclamos del festival. Con disco nuevo también esta temporada, Fuego, los cántabros liderados por el incombustible Hendrik Röver tiraron de oficio para un concierto poderoso con un Parque Tenorio ya prácticamente a rebosar. Sonidos del Blues Rock para una noche calurosa que convencieron a cargo de una de las bandas más míticas del panorama nacional. Y el cierre fue para los bilbaínos Los Brazos, los más desconocidos del cartel, pero que acabaron convirtiéndose en protagonistas. El trío realizó un concierto enérgico a más no poder como un colofón a una noche que era un anuncio de lo que vendría el sábado.

El sábado 20 tocaba el turno al mediodía para la Plaza de la Verdura en la que comenzaron The Crab Apples que mostraron el lado más Pop del festival. Hacía ya un calor importante cuando llegó el turno de los riojanos Messura, una banda de la que se espera mucho y que congregó a un importante número de seguidores. Allí estábamos también para verlos por primera vez en nuestro caso y nos convencieron con su sonido más épico, con un Diego M. Continente y compañía lanzados. Hay ganas de su primer disco largo para el que no queda mucho, será el 4 de octubre cuando se publique Animal.

Para entonces, Ezcaray ya era un hervidero de fans de Berri Txarrak. Quedaban pocas horas para una tarde – noche que se antojaba histórica. Los valencianos Los Zigarros, que también contaban con bastantes seguidores y seguidoras a tenor de las camisetas que se veían, fueron los encargados de abrir una tarde que ya contaba con una buena presencia de público. Los Zigarros, que presentaban Apaga la radio, tiraron de repertorio y actitud rockera para un concierto muy entretenido y divertido, que no bajó el ritmo en ningún momento. Tarque venía junto a Carlos Raya a presentar las canciones de su disco. Es Tarque una de las mejores voces del Rock español y demostró que por él no pasan los años. Basando su concierto en las canciones de su disco de debut homónimo, con algunas versiones (electrizante el «Come Together» de The Beatles) y sin necesidad de tirar del repertorio de M Clan, Tarque hizo un gran concierto. Y llegó el turno para Berri Txarrak. Los navarros se están despidiendo con esta gira, hace una semana metieron 20.000 personas en Kobetamendi en Bilbao, y el Power Trío formado por Gorka Urbizu, Galder Izagirre y David González cumplió con creces en Ezcaray. Fue un concierto brutal, de una intensidad sonora que superó a su primera visita en 2017. Con un público entregado, hay que estar muy desconectado del momento para abstraerse de su música, Berri Txarrak descargaron toda su carga y furia en uno de los conciertos del año. El cierre de la jornada no le fue a la zaga con los suecos The Baboon Show que, bajo una fina llovizna nocturna, mantuvieron la potencia rockera para los que aguantaron hasta el final.

Éxito para la tercera edición del Ezcaray Fest que volverá en 2020. Gran acierto en el cartel y un público entregado que ya estará esperando y especulando con los nombres que darán forma al del año que viene, aunque todavía queda mucho tiempo.

Los Zigarros, «Apaga la radio»

El grupo valenciano Los Zigarros han publicado su tercer disco, bajo el explícito título de Apaga la radio. Convertidos en uno de los referentes del Rock ‘N’ Roll nacional, siguiendo la estela de Burning, M Clan, etc., Los Zigarros han apostado en su tercera entrega por un trabajo guitarrero pero con unas letras que muestran también un elevado presentismo y un estado de ánimo sobre la situación actual. Que nadie piense que es un disco político, no, no es eso, pero sí que hay un retrato generacional y una cierta visión de la realidad. Los hermanos Ovidi y Álvaro Tormo, que encabezan la banda, junto a Natxo Tamarit al bajo y Adrián Tabes a la batería, traen un disco rockero y guitarrero, producido por Carlos Raya (M-Clan, Quique González, etc.), que también aporta ese estilo tan inconfundible. Es un disco que entra desde el primer momento, con canciones muy adictivas, pero al que también le falta algo, posiblemente una mayor profundidad o algunas letras que flojean. Sin embargo, estas cuestiones se ven superadas por la actitud y por una contundencia que se echa de menos en el panorama nacional actual.

«La trampa» es un comienzo corto, un medio tiempo que casi funcionaría más como una introducción, con un tono acústico que no aparecerá en todo el disco. «Apaga la radio» entra a cuchillo, es un tema muy rockero que critica las tendencias actuales musicales y el papel del Rock ‘N’ en la escena actual, con riffs potentes y estribillos contagiosos. «Mis amigos» es una versión de la banda de Portugalete The Flying Rebollos, en cuya versión original de finales de los noventa colaboraron Robe Iniesta (Extremoduro) y Fito Cabrales. Es una canción también muy rockera y con una letra que no ha perdido vigencia, llamando un poco a ese «lado oscuro» y «canallesco». Llega el turno para «Listos para el despegue», aquí Los Zigarros endurecen su sonido y logran una canción que impacta, para mí el mejor momento de todo el disco, con la base rítmica adquiriendo un nuevo protagonismo. En cuanto a «Malas decisiones», Rock con reminiscencias de Burning pero que cae en el tópico y en los lugares comunes.

En «Queda muy poco de mí» es una de las canciones donde se nota el toque de Raya, una canción que gana con las escuchas. «No sé lo que me pasa» cuenta con un toque más clásico, ese Boogie Rock, pero pierde por una letra que se queda a medio camino. En «Con las manos rotas» se acercan a un tono más melancólico, es una canción que funciona muy bien, una de las vías que exploran menos en el disco. Las dos canciones del final tienen un punto más cercano a M Clan, comenzando con «Con un solo movimiento» que apuesta por lugares comunes, esos coros del final, adoptando un tono incluso nostálgico, y la más pesada y contundente «Espixas» que convence más, con unas guitarras de nuevo en primera línea.

Buen disco de Los Zigarros aunque te quedas con la impresión de que podían haber llegado un punto más lejos. Hay canciones muy atractivas y seguro que los disfrutamos en el Ezcaray Fest el 20 de julio en la tercera edición de este festival.

Garbayo, «Sonido forestal»

Hace unos meses, a finales de 2018, Ignacio Garbayo publicaba Sonido forestal, debut en solitario producido por Kaki Arkarazo. Con este disco, firmado como Garbayo, cerraba la etapa con su banda Zodiacs, la banda getxotarra que tuvo su momento hace unos años. Recordemos, además, que los Zodiacs también estuvieron en la tercera edición del curso de verano «Identidad y Música» que organizábamos Sergio Pérez de Heredia y un servidor, concretamente fue en un casi lejano ya 2017. Volviendo a Sonido forestal, nos encontramos con un trabajo absolutamente convincente, con Rock & Roll y Power Pop, predominando el segundo, y con una presencia destacada de las guitarras. Diez canciones muy orgánicas y que calando con las escuchas, aunque algunas son más directas y ya entran desde el minuto uno. Un disco en el que Garbayo se muestra como liberado y que también tiene resonancia del Pop y el Rock español de los orígenes, a The Kinks y a melodías Pop que se van colando entre unas guitarras urgentes.

El comienzo es atronador, «Nitroglicerina» es un tema muy rockero, muy atractivo y con unas guitarras poderosas. «Busca entre la basura» sigue en la senda guitarrera con un sonido mezcla del Rock y del Power Pop con referencias a The Kinks. En cuanto a «Huye del monstruo», deriva al Power Pop y es una canción que gana con las escuchas y que cuenta con una batería protagonista. En «¡Muévete!» apuesta por un esquema guitarra – batería siendo una de las canciones más logradas, con un sonido poderoso y adictivo. «Sobrenatural» se acerca de nuevo más hacia el Power Pop pero por momentos también nos recuerda a los primigenios Tequila.

«En la televisión» reduce levemente el tempo siendo una canción muy lograda, sigue en la senda del Power Pop con una letra de desamor. «Natural y fresca» comienza con una guitarra más clásica para continuar con el ya mencionado Power Pop. «En el bosque» recuerda al Pop español de la década de los sesenta del siglo XX, una canción que es más melódica pero que culmina con unas guitarras potentes. Éstas ganan protagonismo en la más rockera «Te dejaré atrás» antes de llegar al cierre con «Soy un cerdo», melodías de Power Pop con una letra un tanto curiosa.

Fantástico disco de Garbayo que seguramente no tendrá el recorrido que merece pero que ha realizado un trabajo sensacional. Urgente y acelerado, canciones vitamínicas en torno a los tres minutos a las que te vas enganchando. Y en julio, en el Ezcaray Fest junto a Los Deltonos y Los Brazos el día 19 viernes.